Cuando se trata de desarrollo ágil, el mapeo de historias de usuario es una técnica valiosa que nos ayuda a los equipos a visualizar y priorizar nuestro trabajo. Se trata de una actividad colaborativa que permite a los propietarios de productos, desarrolladores y otras partes interesadas obtener una comprensión compartida del alcance de un proyecto, a la vez que permite una comunicación eficaz y un desarrollo iterativo.
Por ello, hoy nos adentraremos en las mejores prácticas para el mapeo de historias de usuario en el desarrollo ágil y exploraremos cómo puede impulsar el éxito de nuestro proyecto.
¿Qué es el mapeo de historias de usuario?
Antes de profundizar en las mejores prácticas, aclaremos qué es el mapeo de historias de usuario y por qué es esencial en el desarrollo ágil.
El mapeo de historias de usuario es una técnica utilizada para crear una representación visual de las historias de usuario de un producto, las características y su priorización. Fue introducido por Jeff Patton como una forma de proporcionar una visión de alto nivel del producto y para facilitar la conversación y la colaboración dentro de los equipos ágiles.
Una historia de usuario es una descripción sencilla y centrada en el usuario de una característica o funcionalidad desde la perspectiva de un usuario final. El mapeo de historias toma estas historias de usuario y las ordena en una secuencia lógica, creando un mapa visual del viaje del usuario a través del producto. El eje horizontal suele representar el flujo de trabajo o la cronología del usuario, mientras que el eje vertical representa la prioridad o importancia de las distintas historias de usuario.
Dado que se trata de un proceso dinámico, el mapa puede evolucionar con el tiempo a medida que el equipo va conociendo mejor el producto y las necesidades del usuario.
Ventajas del mapa de historias de usuario
El mapeo de historias de usuario ofrece numerosas ventajas en el desarrollo ágil. En primer lugar, ayuda a garantizar que todos los implicados en el proyecto tengan una comprensión clara y compartida del alcance del producto. Además, la representación visual permite a los equipos priorizar el trabajo de forma eficaz, centrándose en lo que más importa a los usuarios. Al alinear al equipo en torno a un objetivo común, se reducen los malentendidos y los conflictos.
Por otra parte, el mapa de historias de usuario facilita la adaptabilidad, permitiendo a los equipos responder a los cambios en los requisitos y la retroalimentación. El mapa también proporciona transparencia sobre el progreso y las prioridades del proyecto, lo cual es crucial para las partes interesadas y los miembros del equipo. Por último, al dividir las características en historias de usuario más pequeñas, el desarrollo se hace más manejable y eficiente.
Mejores prácticas para el mapeo de historias de usuario
Ahora que entendemos los fundamentos, vamos a explorar algunas de las mejores prácticas e ilustrarlas mediante la construcción de una web de comercio electrónico imaginario llamado Juice Site.
1. Implicar a las partes interesadas adecuadas
El mapeo de historias de usuario debe ser un esfuerzo de colaboración. Por lo tanto, debemos asegurarnos de que todas las partes interesadas estén presentes, incluidos los propietarios del producto, los desarrolladores, los diseñadores y los usuarios finales, si es posible. Es importante recordar que cada perspectiva añade valor a la conversación y ayuda a crear un mapa más completo.
2. Empezar con un objetivo claro
Debemos definir el objetivo de cada sesión. ¿Vamos a cartografiar un producto completo, una característica específica o una parte de un proyecto? Tener un objetivo claro en mente mantendrá la sesión centrada y productiva.
Ejemplo de objetivo: Crear un story map de usuario para las características principales de la web de comercio electrónico.
3. Preparar las historias de usuario con antelación
Antes de la sesión de mapeo, debemos tener preparada una lista de historias de usuario. Y, las historias deben estar escritas en un formato estructurado, como «Como [usuario], quiero [acción], para que [beneficio]». Unas historias de usuario bien definidas son esenciales para un mapeo eficaz.
Ejemplo:
Antes de la sesión de mapeo, tenemos preparada una lista de historias de usuario:
- Como cliente, quiero buscar productos por categorías.
- Como cliente, quiero buscar productos por palabra clave.
- Como cliente, quiero ver los detalles del producto.
- Como cliente, quiero añadir productos a mi cesta de la compra.
- Como cliente, quiero pasar por caja.
- Como cliente, quiero realizar un pago.
- Como cliente, quiero recibir un correo electrónico de confirmación del pedido.
4. Organizar las historias de usuario de forma lógica
Debemos organizar las historias de usuario en una secuencia lógica, siguiendo el recorrido del usuario a través del producto. Es importante comenzar con la interacción inicial del usuario y avanzar a partir de ahí. Este paso ayuda al equipo a entender el flujo del producto y cómo las diferentes características encajan entre sí.
Ejemplo:
De izquierda a derecha: Esto representa el flujo de trabajo del usuario de principio a fin.
5. Priorizar historias verticalmente
Debemos utilizar el eje vertical para representar la prioridad relativa de las historias de usuario. Las historias en la parte superior del mapa se consideran elementos de mayor prioridad, mientras que las que están más abajo en el mapa son menos críticas. Esta representación visual ayuda a los equipos a centrarse en lo más importante.
Ejemplo:
Utilizamos el eje vertical para priorizar las historias de usuario. Colocamos las historias de mayor prioridad más arriba en el mapa:
Prioridad más alta
| Buscar productos
| Buscar productos
| Ver detalles del producto
| Añadir productos a la cesta
| Proceder a la compra
| Realizar el pago
| Recibir confirmación del pedido
Prioridad inferior
6. Colaborar y debatir
Debemos participar en debates a medida que organizamos las historias de usuario. Es una oportunidad para aclarar incertidumbres, identificar dependencias y recabar opiniones del equipo. Ergo, la colaboración es clave para garantizar una comprensión compartida del alcance del proyecto.
Ejemplo:
- El equipo discute la importancia de la función de búsqueda y decide darle más prioridad porque es crucial para la comodidad del usuario.
- Hay una discusión sobre la necesidad de un checkout como usuario invitado y el checkout de usuarios registrados, lo que lleva a historias de usuario adicionales para estas opciones.
7. Estar abierto a los cambios
El mapeo de historias de usuario no es una actividad de una sola vez. Por lo tanto, debemos estar abierto a revisar el mapa a medida que avanza el proyecto y evoluciona la comprensión del equipo. Se trata de un documento vivo que debe adaptarse a los cambios en los requisitos y a los comentarios de los usuarios.
Ejemplo:
Durante el debate, nos damos cuenta de que hemos pasado por alto una historia de usuario relacionada con el registro y el inicio de sesión de los usuarios. La añadimos al mapa.
8. Utilizar ayudas visuales
Podemos mejorar nuestro mapa de historias de usuario con ayudas visuales como notas adhesivas, rotuladores o herramientas digitales. Esto lo hace más atractivo y fácil de seguir, especialmente en equipos remotos o distribuidos.
Ejemplo:
Para que el mapa de historias de usuario resulte más atractivo, utilizamos notas adhesivas para representar cada historia de usuario. También utilizamos diferentes colores para denotar el estado de cada historia (por ejemplo, no iniciada, en curso, completada).
9. Dividir las historias de usuario en partes apropiadas
Debemos asegurarnos de que las historias de usuario son lo suficientemente pequeñas como para ser completadas en un solo sprint. Las historias demasiado grandes pueden provocar retrasos y obstaculizar el progreso. Si una historia es demasiado grande, consideremos la posibilidad de dividirla en partes más pequeñas y manejables.
Ejemplo:
Observamos que la historia de usuario «Realizar un pago» es bastante extensa, ya que incluye varios métodos de pago. Para mantener historias de usuario del tamaño de un sprint, decidimos dividirla en historias más pequeñas como «Pago con tarjeta de crédito» y «Pago con PayPal.»
10. Mantener el mapa visible
Una vez creado el mapa de historias de usuario, es importante hacerlo visible para todo el equipo. Esto promueve la transparencia y mantiene a todos alineados con los objetivos y el progreso del proyecto.
Ejemplo:
Una vez creado el mapa de historias de usuario, podemos colocarlo en un lugar destacado, ya sea en un espacio físico o en una herramienta digital, donde todo el equipo pueda consultarlo.
11. Iterar y perfeccionar
A medida que vayamos completando sprints y recopilando comentarios, debemos revisar nuestro mapa de historias de usuario. Ajustar las prioridades, añadir nuevas historias y eliminar las obsoletas. La iteración es un principio básico del desarrollo ágil y nuestro mapa de historias de usuario debe reflejarlo.
Ejemplo:
A medida que avanzamos en los sprints, debemos actualizar el mapa de historias de usuario para reflejar el estado actual de cada historia de usuario. A medida que se completan las historias o cambian las prioridades, el mapa evoluciona en consecuencia.
12. Capacitar al propietario del producto
El propietario del producto desempeña un papel fundamental en el mapeo de historias de usuario. Debe tomar parte activa en el proceso, asegurando de que el mapa se alinea con la visión del producto y las necesidades del cliente.
Ejemplo:
El propietario del producto toma parte activa en la sesión de mapeo, asegurando que el mapa se alinea con la visión del producto y las necesidades del cliente. Tomamos decisiones basadas en los comentarios de los usuarios y las tendencias del mercado.
13. Supervisar el progreso
Debemos utilizar el mapa de historias de usuario para realizar un seguimiento del progreso y ver cómo las historias completadas se alinean con la visión general. Es importante actualizar regularmente el mapa para reflejar el estado actual del proyecto.
Ejemplo:
El equipo actualiza periódicamente el mapa de historias de usuario con el estado de cada historia de usuario, indicando cuáles se han completado y cuáles están en curso. Esto proporciona transparencia sobre el progreso y las prioridades del proyecto.
Siguiendo estas buenas prácticas y utilizando este ejemplo práctico, podremos crear y utilizar eficazmente un mapa de historias de usuario para guiar el desarrollo de cualquier producto digital. Esta representación visual garantiza que el equipo tenga una comprensión compartida del alcance y las prioridades del proyecto, lo que conduce a un proceso de desarrollo más eficiente y exitoso.